Aún así, quizá haría cosas que el pensamiento y el excesivo razonamiento no me permiten hacer, me atrevería sin meditarlo tanto y las consecuencias me importarían menos, hasta incluso podría equivocarme menos al dejarme llevar más por el corazón que por las razones que mi ha cabeza ha errado. Tampoco me daría cuenta de muchas cosas por lo que no entrarían en mí y no me harían daño. Puede que le dé la razón a la frase "la risa abunda en la boca de los tontos", pero y qué, al menos sería más alegre aunque la gente se burle de mí, aunque no sea más inteligente. ¿Pero la inteligencia qué?
1 comentario(s):
La persona pensante está más consciente de su sufrimiento. Yo tengo tu misma manera de pensar. Tanto se parece que a veces me da miedo, eso ya te lo había dicho.
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